"La mentira dura mientras la verdad llega."


Siempre será una mentira así sea repetida mil veces y llegue a pasar como una verdad. La mentira es uno de los peores defectos de las personas, sobre todo, aquella mentira dicha con el objetivo del beneficio personal. Desde pequeños nos enseñan la tan conocida historia de Pinocho, a quien le crecía la nariz a cada mentira que decía.


Existen personas que tratan de justificar su mentira diciendo que son “piadosas” y que no perjudican a los demás, otros dicen que todo depende de la magnitud de la mentira, mentirillas o mentiras grandotas, la mentira en su esencia es incontable y por lo tanto no existe el tamaño ni medida, a pesar de que si sus efectos conlleven a daños graves o leves.


El hombre es capaz de disfrutar diciendo mentiras o ocultar las verdades pero obviamente no nos gusta cuando los papeles se cambian y somos nosotros los engañados. A pesar de todo el ser humano es tan hábil diciendo mentiras que en ocasiones se auto engaña y vive en fantasía o se enreda en una red de mentiras tejida por él mismo.


Hay quienes podrán engañar a muchas personas durante algún tiempo, pero nunca podrán por mucho tiempo. Aunque sea algo grave, vergonzoso, doloroso siempre con la verdad por delante, o dejar que luego nos tomen a burla y nadie nos crea ni el apellido.






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